MUJER DE ARMADURA

Mujer valiente que camina entre el viento y el tiempo,
que susurra al universo sus alegrías y pesares, buscando respuestas.
Mujer que deja huellas en el reloj,
que cuenta historias, anécdotas para pequeños seres
que te buscan entre coordenadas.

Mujer de la armadura oxidada,
esa que pelea aún con el cansancio encima,
y aunque la tormenta repose sobre su hombro,
le sonríe con esperanza, buscando salida.

Dios te hizo de estatura corta y de corazón grande,
sabía los tiempos de carencia a los que te enfrentarías.
Mujer de sonrisas vastas y llantos silenciosos,
cuéntanos, ¿de dónde sacas la fuerza?

Mujer de batallas fuertes y sentimientos frágiles,
a quien Dios dio paz en las manos,
porque al rosarte con ellas,
sientes la calma del universo naciendo en tu ser.
La que da amor y esperanza,
increíble don que el universo te regaló
al iluminar el sendero por el cual paseas.

Cabellos blancos que crecen y te acompañan,
arrugas que cuentan historias,
recuerdos que relatan tiempos de experiencia.

Heroína de muchos, compañera de otros,
privilegio que Dios te dio al compartir con nosotros tu esencia única y mágica.
Dura en el tiempo, vives con más ganas, más sueños,
con más lujuria y pasión,
y quiero enmarcar tu recuerdo en mi pecho por la eternidad,
para que, aunque el tiempo te robe,
vivas en mí eternamente… mamá.