Vigilia

poema de Caralvicra

Otro café, oscuro como la noche
Otro día que desaparece.
Siento los pasos del viejo reloj.
Y la tristeza no se desvanece.
Te miro mi dulce niña
Eres un ser increible
Aun siento tu sonido de espadas.
Luchando como una guerrera invencible.
Te vuelvo abrigar. Te beso.
Miro la ventana y pienso.
La calle es un pantano espeso.
Donde me hundo en frio intenso.
Vuelvo a arreglar tu pelo.
Dónde andarás ahora en cual sueño.
Tu respirar se vuelve intenso.
Me asusto, me siento.
Una pequeña lágrima se asoma por la ventana de mis ojos.
Mas atras sus hermanas tambien se asoman por sus hombros.
Aveces me miras y me reconoces
Y tus ojos son dos universos.
Que resplandecen.
Aveces tengo ganas de gritar vuelve.
De romper esa cama carcelera.
Que no te deja volar a las estrellas.
Hace frio en mis venas.
El corazon esta flojo ya no bombea.
Otra vez enciendo la leña.
Mientras el mundo esta en cuarentena.
Yo lucho con el virus de la pena.
Gracias por escucharme amiga poesia.
Gracias por venir a visitarme.
Mañana volveremos a amarla
Mañana encenderemos la fogata de su alma....ya es tarde descansa.