invierno constante
poema de Acero etereo
Conozco una calle
en donde el invierno no cesa.
los niños del hambre
queman allí sus cucharas,
sucesos que no cesan de quemar sus sesos
haz como si no escucharas
¿también te lo callas?
no te hagas drama sus callos hablan.
sucede que el estomago les chilla
su cede son casas vacías
dime ¿tu lo sabias?
dile al capitán que no es ni tanto
ni tan pronto para decir basta.
dile a el capitán que pan quita,
porque igual entre flores coloridas
no vio los grises del las afueras
y aun camina, bebe y silva.
no hablen de milagros si no saben de logros
pasaron miles de años y no acabaron con los ogros.
Comentarios & Opiniones
Dolor de dientes y un poco de nubes grises, un rico menú para nutrir las visiones mustias...
Es exactamente la imagen que intentaba plasamar, gracias por pasarte y leer. Un gran abrazo.