“Qué pensaría Freud de la maja desnuda?”

“ Qué pensaría Freud de la maja desnuda?”

Qué diría Sig si pudiera incurrir
en tu predecible y resistido inconsciente.
Si como argonauta desconchado,
incursionase en lo profundo
de tus cancerianos océanos de corrientes
invertidas...
En los pedregosos pensamientos verduzcos como buen escorpión de río.
Si como obra de Goya te postrases
perfilada sobre las fibras de un diván,
descubiertas las ánforas de tus caderas y
descorridas las cortinas de tu quid
existencial.
Si consintieras sin estériles asideros
el tránsito soleado y analítico,
por las estaciones de tus fases...
Si cejaras el eje constrictor
q frunce tus cimarrones instintos.
Si renunciaras a ser origami autodidacta
de involuntarias circunstancias.
Si decidieras somatizar la conciencia
de las desatendidas urgencias,
q se acumularon en el terror atávico
al extravío del blofeado autodominio...
Si te tumbaras cual “la maja”
con la piel frente al espejo,
presta a la escucha de los gritos
pescados por el batiscafo de tus vísceras...
Si apelaras a ese Freud q subyace
en lo más ignorado y conocido por ti,
soltando de una vez la ridícula escafandra,
sin tomar en cuenta q pensaría
y escaparas del Prado,
a donde no perteneces más...
Serias entonces la auténtica obra pensada por Goya y descubierta por Freud.
AC.