Si tengo que decir no

No me gustan las cosas rebuscadas.
El blanco, es blanco.
Y el negro..., negro.
Inútil ocultar con falsos atavíos,
un cuerpo que apenas sostiene su peso.
La luz brilla...
Por encima de la más oscura noche,
siempre sale el sol.
Acaso puede ocultarse el trino,
flamante estreno del día que amanece?
Puede taparse el aroma de las flores,
el estallido de un beso,
la cristalinidad del río cuándo canta?
No hay alas que sostengan un vuelo raso.
Pero sí!... hay nubes esperando las alas diestras.
Regálame, hoy, ese nuevo vuelo!
Déjame aspirar hondo el aroma de los valles!
Quiero llevarme hasta el crujir de las hojas resecas!
No distraigas al tiempo, que se detuvo hoy sólo para mí!
Sé de sueños...
Sé de esperas...
Sé de vuelos...
Hacia dentro y hacia afuera.
Explotan las palabras que pujan por nacer.
Hijas nacidas de mi alma poeta que se desboca.
Torbellino de pasiones que despiertan inquietas.
Hoy, no me niego a abrir las puertas de mi alma.
Hoy, no tengo que decir no.

09/10/2018