COBARDES

Cobardes, ja! Me apiado de ellos.
Cobardes para reír, cobardes para llorar,
cobardes para vencer, cobardes para luchar,
cobardes para vivir, cobardes para morir.

Cobardes para gritar, cobardes para callar,
cobardes para amar, cobardes para odiar.

Sea cual sea; siempre somos cobardes.
...
Cobardes de mente, cobardes de corazón.

A caso somos cobardes por naturaleza?
O nos volvemos cobardes al salir el sol?
Cobardía, cobardía!!
Maldita cobardía!!

Si a algo me atrevo; valiente me han de llamar,
A contrario sensu; cobarde he de resultar.

Increíble contradicción,
el número de valientes no supera a los cobardes,
porque la valentía y la cobardía son gemelas inseparables
como el bien y el mal (la vida y la muerte se rifan para mantener el equilibrio).

La valentía y la cobardía son caras de la misma moneda.

Si me profesó valiente, mi corazón está siendo cobarde en su otro extremo.

Qué será?, qué será?
Sólo sé que aparentemente sigo viva.