Ventana

Abrí de par en par las ventanas
para que la vida me diera su amor
pero solamente dejó entrar dolor
y bien harto las tapé con argamasa.

Pero al estar solo, todo fue peor.
Poco a poco se pudrió la abulia,
empecé a ladrarle hasta mi sombra
la sombra que también me puse yo.

A patadas las abrí de par en par
bien dispuesto para vivir la vida
comiéndome lo que me quisiera dar
o lo que yo pesque en esta movida.

Porque veo que si no sabes sufrirla
verdaderamente nunca podrás amar.