Los vergeles

En el Sur
y no en el Norte están las flores largas de pelambre,
aguijoneadas por las fieras heridas al sol.
El Norte es odioso, indeseable, saciado de si,
egoísta y avariento
y como el Sur es la Negra que se tiende en los vergeles,
con una piel sin vello
que segrega azúcar
cubierta de granos de cristal
que se le pegan en la frente
en los sobacos, entre las uñas

A veces se la ve apoyada en una pared blanca
como si alguna ocurrencia no la dejara andar,
y cuando vuelve en si,
es porque ya ha adivinado el celo
que derrumba
a los hombres sin pasión.

La veo acompañada,
advierto los rastros del azúcar
en su blusa,entre sus dedos largos
se resbalan como gotas de licor
y se sienta a horcajadas
con la mirada gacha.

Cuando la Negra se tiende en los vergeles,
se encoge,se le enturbia la mirada,
se le pierden los pendientes,
y al desperar
el azúcar le cubre el cuerpo
y la empapa.

Entra en los almacenes y compra vestidos rojos
que ella misma confecciona
costurera amable,
y amante indecisa,
mujer de antes.
No son solo rojos
también verdes
no son solo verdes
rojos, azules y verdes
y purpura como las granadas.

La miro fingiendo una sonrisa,
simulo tener los ojos claros,
y cuando la tengo cerca
yo soy lago,largo,largo ,
como una sombra, y
el olor dulce que se asienta en su parpados
me hace ver mejor ,
me alimenta
me llenaba de un silencio tibio,
de agua.

Cuando la Negra se tiende en los vergeles
yo no duermo.

Comentarios & Opiniones

Silvia

Muy bello!

Critica: 
Centinela Azul

Excelente...

Critica: