Cenizas en la piel

Me miraste a los ojos
me tomaste las manos
tu mirada inquietante
encuadriñó mi alma ...
Me sentí despojada
de todo, en un instante
me sentí desolada
mas sin perder la calma.
Tus ojos parecían
sinceros y maduros
tus labios no podían
decir lo que en ellos veía.
Me solté de tus manos
y desandé el camino,
maldije ese momento
que me jugó el destino.
Ya era tarde mi amado,
para emprender el vuelo
que tus jóvenes alas
me ofrecían el cielo.
Hasta nunca, te dije
te quedaste perplejo
mientras yo, caminando
me secaba una lágrima
y de mi vida en silencio
daba vuelta otra págima! ...