Lunis

poema de San Brendano

Hay una luna menguante hablando tres frases sobre mi tumba.
Un sahumerio colorido se me ha dejado en mi epígrafe. En la tierra negra, grabaron un nombre y una flor Silvestre descansa conmigo.
Leo cada tanto, apenas si respiro, pero contengo el aire.
La sumatoria es la misma «latín y Argo».
Ya es momento. El cuervo trae en su pico mi laurel y tiene mi nombre en el.
Ah, he sido tan felizmente triste. No guardo rencor. Ni hechizos. Hoy será mi postmortem. «Lux» y al final, yo...