Canto a Ariana Bañuelos Conde.
poema de Rogervan Rubattino
Siluetas que reptan los párpados del sol,
pensaba en pensarte guareciendo tormentas.
Como las aves que se agitan entre el cieno y el cielo,
son estrellas claras de antiguas afrentas.
Ella ya no canta ni baila en cenizas,
sus pies ya no se mueven,
sus manos ya no danzan,
los acordes de la brisa.
Y el tierno sereno que hierve,
en su sangre lentamente, levita,
ebulle y eclipsa septiembre.
Ella ya no rompe como las olas en las marismas,
ni juguetea con las dalias de la fuente,
no está muerta, no está viva…
ella sólo esta:
inerme…
ROGERVAN RUBATTINO ©
Comentarios & Opiniones
Que obra mas explosiva que saca a la luz toda una gamma de emociones que han completado una historia llena de pasion y aventura. Aplausos!
Ni si, ni no , ni todo lo contrario .
Bien expresado
Un abrazo
Caballero,encuentro vuestro trabajo dubitativo, abstracto , original. Un gusto como siempre recorrer vuestras letras.
Reciba mis cordiales saludos.
"Ella ya no rompe como las olas en las marismas,
ni juguetea con las dalias de la fuente,
no está muerta, no está viva…
ella sólo esta:
inerme…"
Un gran cierre.
Una mocedad siempre es más dulce en septiembre. Muchas gracias por vuestras amables consideraciones.