No entendió

No entendió mi pasión
que era un amor de mujer
en la brisa de luz sin bruma.

No entendió mi orgullo
que por desmedido
soy yo la que más amo.

No entendió mi furia
que por caer en su espeso velo
mi corazón cintila en el devoto cielo.

No entendió mis celos
que me detienen en su santo paisaje
y siento su diáfana carne .

No entendió mi alegría
con la juventud, su amor
y lo que me quiere.

No entendió mi lujuria
donde la belleza del mundo y lo que fuere
se calcinan en nuestras fogosas sábanas.

No entendió mi tristeza
que por caer en su vida
al fin a un hombre ame en mi vigor.

No me entendió jamás
y mi vida trunca vaga
entre los árboles piadosos.

No entendió mi asombro
que por tres yazgados versos
su pluma soplaría en mi oído.

No entendió mi despecho,
tengo su retrato en el mural
clavado con un puñal.

No entendió mi último deseo
“camina por el camino opuesto
sin un adiós presente”.