Oye

oye

Oye; sí, a ti, a ti te hablo; No te pierdas en tu realidad
No mires nada más tu necesidad, ve las necesidades de los demás
No vivas para sí, debes tener una vida con significado
Con significado real

Aprende a soñar con los soñadores
A reír con los alegres, a llorar las penas de los demás
A ser un “alguien diferente” a ser desprendido y especial
Como alguien inigualable, a vivir en las necesidades de los demás

Recuerda, en primavera como en verano
y en todo tiempo, ayuda el hermano
escuchar los corazones es una realidad mágica,
Mira las gotitas de sangre que de él emanan

Recuerda amar a Dios, antes que a nada
Carga la cruz y sigue a Cristo, y de ese amor emana
La ayuda que darás a tu hermana, ¿quién es tu hermano?
Todo aquel que Dios a tu lado ha colocado
Porque en ti ha confiado, acaso ¿lo has ayudado?

Si no lo has logrado, no te sientas desesperado
Aprende a caminar con los que han caído
A compartir con el egoísta; a comprender a los incomprensibles
Alimentar al ingrato, a cobijar al desagradecido

Simplemente aprende a amar al que no te ama
¿Qué gana el que ayuda a quien ama? eso cualquiera lo hace
Oye, sí, a ti, a ti te estoy hablando ¿ya lo pensaste?
¿Vives para servir o vives mirando?

Si a Cristo has imitado, al desnudo has cobijado
al preso visitado, a la viuda alimentado
en el cielo galardón has ganado , Jesús lo ha analizado
bien si en amor has crecido y eres desprendido

oye, si a ti te digo;
porque en todo tiempo da el amigo, y tú
¿ya has aprendido a amar como amó Cristo?

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Mirian Arellano Alvarado.