Café
Es increíble, de verdad
Como un aroma hace recordar
Toda una vida y un gran amor
De una persona como yo, este humilde servidor
Soy hijo de la hierba
Y hermano del arroyo
Mi cuerpo es poesía
Y mi mente, un gran apoyo
Todas las mañanas
A cierta hora puntual
Los más trabajadores, podían disfrutar
De una bebida que no se puede comparar
Pero ya había crecido
Y me fuí de aquel lugar
Con afán de forajido
A una tierra más vulgar
Ahora puedo recordar
El sonido de tus pasos al andar
Por la senda o el camino
Que tu belleza alumbra al caminar
¡Con café te conocí!
Y entonces fuí hacia ti
Valiente, haciendo el fuerte
Sin importarme el porvenir
Recuerdo lo vivido
Risas, juegos, canto y baile
Tristeza y dolor,sin hacer alarde,
Definitivamente era cobarde
Un abrazo y un adiós
Platicando en la carreyera carretera
Tu decisión y no la mía,
Las cosas acabarían
Aun recuerdo tu mirada
Y la hora de mi muerte
Y esa taza de café
Que quebró toda mi fé