MALAGUEÑA
poema de Carl Allen
MALAGUEÑA
Mis líneas de despedida,
recuerdan lo que he callado.
Hoy que vuelves a la vida,
junto al mar que has añorado.
Es eterna tu sonrisa,
como el sol sobre tu tierra.
Como esa mirada limpia,
siempre brillante e inquieta.
Tú has sido acento cercano,
de verano, en el invierno.
Belleza y gracia perdida,
bocetada en un cuaderno
Al final de la rutina;
al final de la jornada.
Tú has sido una cara amiga,
y el recuerdo de una playa.
De tu Málaga y su feria.
La Farola y la Alcazaba.
La belleza que vigila,
Gibralfaro en la mañana.
Ciudad que ha sido destino
y comienzo del descanso.
Ciudad de tapas y fino;
de pasiones y verano.
-¡Vuelve a casa malagueña!.
Vuelve a su embrujo y su encanto.
Y devuelve tu belleza,
a sus rejas y sus patios.