Dureza

Al rumor del viento
Corazones de cemento
Se deshacen con tu baile
tan profundo y con esmero.

Tu alma pura como un fraile,
como un niño con sus padres.
Esperando el momento correcto
para destruirlos con tu ensamble.

Corre alma corrupta,
te han descubierto.
Con tus sucios trucos,
con tu pecho abierto.
Los ojos más hermosos,
son deseo hambriento.

Mira hacia el futuro,
y mírame sediento.
Más sangre, más huesos, más ojos mugrientos.
Sobre tí, sobre tu pelo,
quítalos, no los quiero.
Huye hacia mí,
soy tu cielo,
soy tu infierno.