Sin reproches

poema de Mistered

Tiempo, que blanda lágrima evaporas,
y endulzas los recuerdos más amargos,
permíteme salir de mi letargo,
ponle fin a mi pesar en esta hora.

Me dio su amor, ella sabrá cuánto,
más lo cierto es que ya no me quiere,
amor negado a un corazón que requiere,
su cariño, su ternura, su encanto.

Si alguien la ve y en sus ojos,
halla un destello amoroso,
tan lejano a aquel enojo,

que terminara con el gozo,
de amarnos de día y de noche,
que le diga que en mi alma no hay reproche