Octubre.

poema de LechugaCorpse

El tiempo se avecina, cae bajo su propio peso
Y una avalancha de emociones se amontonan tras mi pecho.
Hace meses que no escribo nada remotamente bueno,
Solo la ansiedad y el hastío se recuestan en mi lecho.
Aunque el mundo es tan grande prefiero mis cuatro paredes
Donde solo entran mis amigos, mi sobrina y un par de mujeres.
Voy con el alma rota por el peso de la edad
Y aún cuando he pasado buenos tiempos estoy acostumbrado a no ganar.
La esperanza me abandona, el fatalismo me condena
Pero ahí siguen las ansias de comerme al mundo con mis letras.
Tal vez nunca seré un poeta maldito, un escritor reconocido
Pero el alma me exige seguir escribiendo y no darme por vencido.