Lienzo de Tarde.

poema de Celeste Alma

Se encela la faz otoñal del paisaje teñido sobre lienzo en pinceladas ocre...

Las hojas caídas de sus árboles , cual si fuesen durmientes hadas besadas por un fuerte viento
emiten su quejido desquebrajado, con esa voz larga y sublime de reposante paraíso sobre el Morfeo lago.

Cuando ve nuestros cuerpos desnudos ... tan húmedos de rocío delirante,
solícitas, extienden un agrietado trozo desde su borde aguzado, aún florido de majestuosa belleza serena

y, al toque solitario de su violín , clásico eco creado por la luz huída de la tarde

se embelesan y encelan ... se encelan y embelesan, culminando en una sintonía que al oírla, enamora irremediablemente

a nuestros cuerpos desnudos ... jinetes andantes difuminándose lentamente en sombras.