Atardecer en San Blas.
poema de Celeste Alma
Encayó tu barca en polvorín de arena
y estallamos nuestro verso
a la par con la Riviera.
Qué corazón tan mío y tuyo...
tan tuyo y mío nos encuentra
abrazados, a punto de fundirnos
cual si sólo uno fuera...
Así me quedaría, mi Fernando,
si en este mismo instante yo muriera...
en este mismo instante
si Dios lo dispusiera.
Cuánto quisiera ser siempre tu novia...
Aunque hoy soy tu esposa
también sería por siempre, si pudiera
eternamente amante de tu cuerpo...
Morbosa...Tierna...Alegre...
Sí...así...Tu novia eterna.
Comentarios & Opiniones
Hermosas letras, me encanto la composición hacia su esposo, bendiciones y gracias por compartir sus poesías. Saludos.