Con la zurda
poema de J.Carlos Campos
Lo que ya no es necesario,
mi querido socialista,
es que aguantes el calvario
de llamarte progresista.
Hermano, suelta mis manos,
no me sigas arrastrando,
déjame el alma en el cielo,
yo quiero seguir volando.
Mira tu rosa marchita,
tu puño hundido en el muro,
tus sienes son dos heridas,
tus hijos sordos y mudos.
Abre las rejas de forja;
sueñan volar los vencejos,
pues volverán las antorchas
si pagas hierro con hierro.
Tu boca ya no es la mía,
tu gente ya no es mi gente,
presiento que se avecina
un "adiós", que es para siempre.
Comentarios & Opiniones
muy triste final
Muy buenas letras,interesante, saludos cordiales felicitaciónes.
Un mensaje muy interesante, el poder es lo que tiene, ya lo hemos visto antes. Saludos y felicidades por tu buen hacer letras siempre.
Muy bueno Juan Carlos, siempre un placer visitarte, saludos cordiales.
Final intenso y triste, poema repleto de sentimientos salidos del alma,profundos. Gracias por darme el lujo de leerte y un placer poeta, saludos.