Me ahorraste un adiós

Te dije, vivamos el momento,
y los segundos se tornaron en la eternidad,
ahora observo tu salida desde un sillón,
sintiendo nostalgia sin dolor,
aunque era justo lo que anhelaba yo.

Pensaba decir adiós,
y me ahorraste una situación,
primero nos alejamos,
¡oh mi error!, ¡mi equivocación!,
usted fue quien camino.

Miraba las pisadas para poder encontrar,
respuestas a situaciones imaginadas,
de una mente un tanto opaca,
¡que no sabía que le amaban!,
y que el tiempo le borro.

¡Gracias!, y vuelvo y repito ¡gracias!,
por darme la oportunidad,
de ver y de avanzar,
aunque hay piedras de camino,
me contento que sigo vivo.