La cuerda.

Pregúntale a las estrellas y ellas te contestarán.
Pregúntale a tu corazón y este te responderá.
Pregúntale a Dios y él te iluminará!
Pero ten cuidado con lo que preguntes...
Tal vez la respuesta no te agrade.

Perdí el rumbo y horizonte.
Empecé a vagar por las calles sin ningún sentido.
Volví a revisar mi interior nuevamente...
A ver si de casualidad encontraba algo! un apice de luz , una porción de esperanza, una mínima cantidad de felicidad...
Decepcionado entregué mi alma a Dios.
Ya se me hacía tarde; mi destino debía ser revelado de una ves por todas!
Necesitaba una señal!
Lo que fuera! Lo necesitaba ahora!
La rabia me invadió, y grite con todas mis fuerzas:
Señor, dime!
Cuál es mi destino?
Cuál es mi propósito?
Que es lo que debo hacer en esta vida?
Lo que me digas lo haré ahora mismo!
Que es lo que debo hacer?
Dame una señal!
Levanté la mirada y miré hacia el cielo.
Divisé una soga en forma de horca colgando del tendido eléctrico.
Justo a la altura de mi cuello!
Lista para ser utilizada!
La respuesta era simple...
El mensaje era evidente.
Toda una vida esperando una señal de los Dioses... Y está era su voluntad!
Solo una cuerda! es lo que necesito...
No hay excentricidades, ni extravagancias, acertijos complicados o tramas espectaculares...
Los Dioses son claros con sus respuestas.
No hay crueldad en su voluntad.
Mañana compraré una cuerda...