Las tumbas nos hablan todo el tiempo
En medio del silencio sepulcral y eterno de la muerte
Surgen voces inaudibles en cada cementerio,
Reclaman ser comprendidas y escuchadas
Para permanecer vigentes en nuestras memorias.
Algunas de semblante sosegado y tranquilo,
Otras, tristes y desoladas,
Clamando letanías para purgar sus penitencias,
Aunque muchas, dichosas por su eterno descanso.
Los estigmas del duelo también se hacen presentes en las tumbas,
Evidenciando vestigios progresivos de una macabra transición.
Almas resignadas a deambular en el limbo,
Maldicen un sórdido designio infernal.
Ánimas bienaventuradas por las deidades,
Trascienden a planos astrales de supremacía.
Realmente las tumbas hablan por sí solas,
Siendo la prueba caligráfica de su cadáver,
Escriben la vida y deceso del fallecido,
Sin necesidad de aludirle retóricas prolijas.
Una lápida refinada y bien acicalada
Haría homenaje a alguien importante y estimado,
Otra lápida sencilla y poco agasajada,
Sólo diría que allí yace alguien del común.
Una fosa adornada con flores finas y delicadas
Proyectaría la pérdida de alguien adorado y sobrevalorado,
Otra fosa rodeada de flores baratas y asequibles,
Harían deferencia hacia alguien extrañado sin tanta vehemencia.
Un conciso epitafio puede dilucidar el deceso del occiso,
Aunque no se le conozca o recuerde en absoluto,
Otorgando pistas sobre cómo fue su vida o muerte,
Hasta sentir que ya le habíamos tratado alguna vez.
Encontrar un colosal mausoleo enchapado en oro,
Delataría al muerto como miembro de familia prestante o mafiosa,
Hallar una lápida sobre fosa sin signos cristianos,
Afirmaría que el fallecido no era precisamente ortodoxo creyente.
Descubrir un panteón abandonado y descuidado,
Supondría que toda su dinastía familiar sucumbió también,
Pues ya no tienen dolientes que se encarguen de embellecer su santuario ancestral.
Ver una lápida con el escudo de un equipo de fútbol;
Además de la foto juvenil del fallecido,
Haría creer que se inmoló por defender su máxima pasión.
Observar el epitafio honorífico y enaltecedor
Escrito en la lápida de un altruista soldado o policía,
Aclararía con certeza, que sucumbió heroicamente defendiendo su causa.
Toparse casualmente con una tierna tumba llena de juguetes,
Contagia de melancolía e impotencia desgarradora,
Discurriendo que ha fallecido prematuramente un inocente infante.
Pasar frente a una bóveda mortuoria plantada en la pared y llena de moscas,
Proveería conocimiento seguro de que el cadáver es bastante reciente,
Pues su cuerpo apenas habrá reventado y comenzado a descomponerse
Desde hace pocos días u horas.
Caminar sobre una sepultura árida y endeble, que se hunde sin oponer resistencia,
Sería indicio de que el cadáver ya se ha descompuesto lo suficiente para ser exhumado.
Incluso, Pasar cerca de una tumba que ha sido cavada para enterrar un nuevo cadáver,
Suele provocar algo de impresión; sobre todo, si es de nuestra medida,
Ya que podría ser una sentencia o premonición de lo que nos espera pronto.
Comentarios & Opiniones
Estimado amigo, me parece una relevante descripción la que haces del pasaje de la muerte, los cementerios como un museo repleto de estilos propios que van acorde con la vida que se ha llevado y que traducen la personalidad del difunto. Aunque
en los países occidentales europeos cada vez se practica más la incineración. Me parece un tema original y te felicito por la selección. La muerte al final se lo lleva todo y los seres humanos seguimos manifestando pasión por el ritual y necesidad
por el duelo, que nos dejen espacios para manifestar el dolor de la pérdida y sobretodo un altar que pronuncie consuelo y esperanza para poder llevar mejor la idea de que la vida tiene un final. Besos.
Hola Panélope: Agradezco tu comentario hacia mi escrito. Quise elegir un tema algo fuera de lo común para crear conciencia sobre el mismo y mostrar este factor de una manera que no muchos se atreven a descifrarlo.Me agrada que lo disfrutaras.
Qué tal amigo Mario, me alegra y halaga una vez más su honorable presencia dentro de mi espacio literario.Precisamente escribo esta clase de temáticas fuera de la trivialidad, esperando que personas como usted puedan descifrarlas más allá de lo
esperado, y así, poder encontrarles significados alternativos que puedan compartirse para enriquecer aún más la experiencia de escribir.Es muy grato saber que siempre es bien recibido mi trabajo por parte suya. Mis mejores deseos para usted también.
muy buena composición,hace un buen análisis agregas creatividad finas letras ¡¡¡saludos!!!!
Qué tal Delky, gracias por su comentario.
"Una fosa adornada con flores finas y delicadas
Proyectaría la pérdida de alguien adorado y sobrevalorado,
Otra fosa rodeada de flores baratas y asequibles,
Harían deferencia hacia alguien extrañado sin tanta vehemencia".Muy diciente y profundo.
Hola María, gracias por tu visita a mi espacio para encontrarte con esta nueva composición, la cual veo que te llegó de manera plena. gracias por tu mensaje.
La muerte siempre tan expectante, tan calmada, y tan segura de sí misma. Nos hace saber que la vida sólo vale lo que nuestras historias fundan sobre ellas y que todo descansará bajo su cobijo frío.
Un trabajo sutil pero esmerado de nuestro fatídico
futuro. Siempre tan expresivo y perceptivo mi buen amigo Andrés.
Un abrazo fuerte, y mis sinceras felicitaciones.
Hola amigo D. G falls. Es un gusto contar con su presencia dentro de mi espacio literario para compartir temas afines a nuestros gustos e intereses. le agradezco el generoso comentario y me agrada que haya disfrutado mi nueva obra.
Todo lo que abarca la vida es interesante. Siempre y cuando se debatan o se mencionen con personas de aceptación y criterio. Tú, mi amigo, eres uno de ellos, como muchas de las personas que se encuentran en este círculo social.
Saludos.
Es la primera obra tuya que leo y me encanta, un saludo y todas las estrellas! seguiré leyendo
Hola Julie, gracias por tu comentario, es un gusto conocerte por este medio. También estaré revisando tus obras para compartir ideas. Un beso para tí.