Doloroso infortunio
poema de Abel Mendoza
Del abismo oscuro, cual madrugada,
brotó la más conmovedora queja.
Ni el recuerdo del día alegre aleja
el gran dolor que sintió por su amada.
Con su bramido descuartizó el mundo;
un mundo feliz que había forjado
con hermosas memorias del pasado,
pero que terminó siendo algo inmundo.
Ahora la soledad toca su alma,
mientras que contemplando el panorama
va perdiendo la esencia de la calma;
se pregunta por qué perdió lo que ama,
por qué se desvaneció de su palma
el cálido amor de su bella dama.
Comentarios & Opiniones
Me gusta tu poesia felicidades
muchas gracias :)